MANERAS DE LEER

MANERAS DE LEER

Me agradan las sesiones de lectura compartida, de intercambio de opiniones, de preguntas y respuestas cuando quienes dialogan tienen fresco y muy interiorizado el motivo del mismo acto de leer. Claro, son lectores por pasión, por convicción. Y eso, se nota. Últimamente, he estado en varios encuentros con lectores. Los hay de todos los pelajes, de distinta profundidad, de diferente finalidad…, pero, entre todos ellos, meritorios, no les quepa duda, quiero destacar aquellos que, a mi juicio, este año han reunido a las personas más entusiastas que, por edad, pueden estar de vuelta de todo. En una palabra, quiero que se sepa su pasión, su devoción a la literatura, su entusiasmo por aprender, disfrutar y compartir –palabras rarísimas en esta sociedad actual, cada vez más egoísta-.

Claro que muchas veces quienes comandan estas reuniones o encuentros son auténticos capitanes, además de increíbles estrategas y de devotos servidores del mejor sentido común en cuanto a la consecución del bien social. Hay, de verdad, territorios sembrados de entusiasmo. No lo digo solamente yo. Hablo por boca de Javier Reverte, Rosa Regás, José María Merino, Inma Chacón, Olga Merino, Fernando Iwasaki, Andrés Neuman… Enumero algunos ejemplos como muestra:

-La Puebla de Alfindén, comandado por Beatriz, la bibliotecaria, que trabaja codo con codo con la escuela, el centro de adultos y el club de lectura. Pequeños y mayores. Una maravilla.

-La Ribera Baja del Ebro que une todos los pueblos de la comarca a través de la lectura, evidenciando que, la lectura, es uno de los ejes más fértiles para hermanar pueblos y hacer Comarca (los centros de adultos y los ayuntamientos en una pasión común).

-El Cepea “Cuencas Mineras” (en tierras turolenses) que, con el entusiasmo de los profesores de adultos, logra la maravilla de hacer de la lectura, no sólo un espacio de placer, sino un auténtica herramienta de aprendizaje (vean su trabajo en los videos colgados en la red).

-También en las llanas parameras de Monreal, sus dos clubs de lectura que, en la biblioteca, se funden con el Centro de adultos y actúan de auténticos vasos comunicantes entre enseñanza y ciudadanía.

-El Club de lectura “Por amor a la lectura” del Baix Cinca (en Fraga/Monegros), con Chus Garcés a la cabeza que están consiguiendo dar cauce social a pueblos de ribera y de secano con la bandera de la lectura. (visiten su blog y verán)

Hay más, claro. Juro extenderme más en otro momento. Solo quiero dejar constancia de una realidad que no cabe en las noticias prefabricadas de los medios de comunicación. Soy consciente de que la lectura no vende, pero sí de que así se hace la cultura, así se expande la literatura, así se crea pueblo y así se posibilita la convivencia. Mil gracias